El turismo dirigido a personas mayores, la creación de nuevas aplicaciones, la innovación tecnológica y el diseño de viviendas adaptadas son algunas de las oportunidades que surgen en el contexto de la “economía plateada“.
El aumento de la población de edad avanzada plantea diversos desafíos en los ámbitos social, de políticas públicas y económico, generando nuevas dinámicas que requieren atención y soluciones adecuadas.
Son bien conocidos los casos de países asiáticos como Japón, Corea y China, donde el rápido envejecimiento de la población y la disminución de las tasas de natalidad han generado preocupación por el declive demográfico, impulsando iniciativas para incentivar a los jóvenes a tener más hijos.
Sin embargo, el cambio en la estructura de la población también puede presentar oportunidades para el crecimiento de sectores como el turismo, la vivienda y los servicios, al ofrecer experiencias diseñadas específicamente para satisfacer los gustos y necesidades de la población mayor.
¿Qué es la economía plateada?
El informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) denominado “La economía plateada en América Latina y el Caribe: El envejecimiento como oportunidad para la innovación, el emprendimiento y la inclusión“, define este término de la siguiente manera:
“La Economía Plateada es aquella parte de la economía global vinculada al cambio demográfico producido por el envejecimiento de la población cuyo enfoque se centra en las necesidades y demandas de los adultos mayores”.
En este contexto, los autores de la investigación señalan que el envejecimiento suele ser percibido como un desafío añadido para la sociedad. Identifican tres desafíos principales derivados de esto: atender la creciente demanda de pensiones, servicios de salud y cuidado de la dependencia.
Los autores sostienen que asegurar que las distintas sociedades puedan abordar estas necesidades de manera sostenible se ha vuelto un desafío fundamental para los países.
“Sin embargo, los grandes desafíos que implica el envejecimiento traen consigo oportunidades de desarrollo económico, con la generación de nuevos emprendimientos y oportunidades laborales, así como una mayor contribución económica de los adultos mayores, dado que las mejores de las condiciones de salud permiten una longevidad más productiva”, añadieron.
Oportunidades para innovar y aportar a la calidad de vida
De acuerdo con las proyecciones del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), se estima que para el año 2050, el 32.1% de la población total será mayor de 60 años. La misma tendencia es prevista por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), que estima que este grupo demográfico representará alrededor del 32% de la población total, aproximadamente 6,430,169 personas.
Ante este escenario de envejecimiento poblacional, surge la pregunta sobre qué medidas económicas pueden implementarse para hacer frente a esta situación y qué nuevas oportunidades podrían surgir en consecuencia.
Solange Bertrand, psicóloga clínica, académica de la Universidad del Desarrollo (UDD) y directora ejecutiva de Appsistente, ha destacado algunas alternativas que podrían considerarse en este ámbito.
En un comunicado reciente, se detallan varias propuestas, una de las cuales es la promoción del concepto de educación continua a lo largo de toda la vida, a través de programas de formación y capacitación dirigidos a personas mayores, centrados especialmente en habilidades digitales y tecnológicas.
El objetivo de esta medida es permitir que este grupo demográfico pueda participar activamente tanto en la sociedad como en el mercado laboral.
Siguiendo esta misma línea, se destaca la importancia de incentivar la innovación tecnológica, especialmente enfocada en mejorar la calidad de vida de las personas mayores mediante el desarrollo de dispositivos médicos inteligentes, aplicaciones para el bienestar, entre otros.
Otra iniciativa relevante es la promoción del emprendimiento entre las personas mayores, facilitando la creación de empresas lideradas por este grupo demográfico a través de incentivos financieros y asesoramiento técnico.
Finalmente, se menciona la importancia de crear viviendas y entornos que sean acogedores para las personas mayores, teniendo en cuenta sus requerimientos de accesibilidad, seguridad y confort. Además de esto, se resalta la relevancia de ofrecer actividades recreativas y opciones turísticas diseñadas específicamente para este grupo demográfico, identificando sus intereses y necesidades.